Los podadores de setos a batería, también conocidos como “podadores de setos inalámbricos”, son una buena opción para muchos propietarios de viviendas. Ofrecen la comodidad de la portabilidad sin necesidad de un cable de alimentación, lo que los hace ideales para patios más grandes o áreas lejos de una fuente de energía. Muchos podadores de setos a batería tienen un desempeño comparable al de los modelos cableados y pueden realizar las tareas de podado más comunes. Sin embargo, su tiempo de funcionamiento se limita a la vida útil de la batería, por lo que podría ser necesaria una batería de repuesto para trabajos más grandes.

Afilar los podadores de setos implica algunos pasos. Primero, debe limpiar las cuchillas para remover cualquier suciedad o savia. Luego, con una lima plana, siga el ángulo del borde cortante de cada diente, limando en una dirección hacia el borde afilado. Después de limar todos los dientes, use una piedra de afilar en los bordes para lograr un acabado más afilado. Siempre asegúrese de usar guantes protectores y de seguir los procedimientos de seguridad adecuados al manipular y afilar las cuchillas.

El hecho de que un podador de setos a gasolina sea “mejor” que un eléctrico depende en gran medida de sus necesidades específicas. Los podadores de setos a gasolina suelen ser más potentes y pueden cortar ramas más gruesas, lo que los hace adecuados para setos más grandes y trabajos profesionales de paisajismo. Sin embargo, son más pesados, hacen más ruido y requieren más mantenimiento. Los podadores de setos eléctricos tanto cableados como a batería son más livianos, silenciosos y fáciles de mantener, lo que los convierte en una opción popular para uso residencial y coberturas más pequeñas.